ASIMILAR E INTEGRAR

Los términos asimilar e integrar tienden a ser utilizados como análogos para referirse al proceso de adaptación de grupos e individuos que migran desde una sociedad hasta otra culturalmente diferente. Ese proceso, que puede llegar a durar generaciones, tiene matices que lo diferencian y que hace que la asimilación y la integración no sean lo mismo.

La palabra asimilar proviene del latín; assimilāre. La asimilación es un proceso de incorporación, mediante el cual una parte nueva se une a un todo llegando a adaptarse hasta el punto de convertirse y conformar una parte más del total de ese todo, perdiendo en el proceso los elementos característicos que lo diferenciaban de él.

La palabra integrar también viene del latín; integrāre. La integración es un proceso de inclusión, en el cual distintas partes nuevas se unen a un todo llegando a adaptarse hasta conformar partes análogas dentro del total de ese todo, sin haber perdido en el proceso los elementos característicos que las diferenciaban, los cuales aún mantienen.

El multiculturalismo constituiría la convivencia simultáneamente de grupos culturales diferentes dentro de un mismo espacio, manteniendo sus propias características identitarias diferenciadoras; cultura, costumbres, lengua, religión, y sin compartir un sentimiento de pertenencia común, ni la noción de estar conformando un todo o un conjunto. La integración, por su parte, constituiría un grado mayor dentro de esa convivencia, llegando a la conformación de una identidad conjunta, pero manteniendo a su vez las diferentes identidades grupales propias. La asimilación constituiría el proceso inverso al multicultural, donde todas las identidades aglutinadas se pierden y solo la identidad común y conjunta perdura.

Los distintos procesos no tienen porqué conformar diferentes etapas dentro de un mismo y único proceso, ligándose con las etapas de cada generación migrada dentro de un grupo cultural diferente, aunque la pérdida paulatina de la identidad primaria, en detrimento del consecuente arraigo de la identidad conjunta, es más fácil que se vaya dando con cada nuevo paso generacional a medida que transcurre el tiempo.